Beatallica agosto 18, 2006

Así como Brad Pitt y Angelina Jolie tienen a Brangelina, los Beatles y Metallica dieron como resultado a Beatallica.

Sus covers:

• Sgt. Hetfield’s Motorbreath pub band
• Blackened The USSR
• Hey Dude (muy buena)
• Leper Madonna
• I Wanna Choke Your Band
• …And Justice For All My Loving

En el sitio tienen disponibles estas y otras canciones más.

Link: Beatallica

«Un Mexicano en Brasil»: Letras rancheras en bossanova agosto 5, 2006

En uno de mis viajes a México, durante mi estadía en Brasil, encontré el disco “Un Mexicano en Brasil”. Por mi condición de expatriado, llamó mi atención inmediatamente desde el estante de la tienda de discos. No fue necesaria una escucha para convencerme a comprarlo, simplemente lo tomé, lo pagué y me lo llevé a casa para meterlo al iPod.

Nacho Méndez es el creador de este disco. Para ser sinceros, nunca había escuchado de él antes, pero hizo un buen trabajo con los arreglos. El disco es original. La idea no es descabellada, pero hasta ahora no sé de alguien más que lo haya hecho antes. La primera vez que escuché el disco fue placentera. Mucho. Me hizo sonreír de buena gana. Escuchar clásicos de la música ranchera mexicana con ritmo y arreglos de bossanova fue gracioso, en el buen sentido de la palabra, y las canciones se aprecian bajo una luz totalmente diferente. La fortaleza de las letras rancheras se convierte en algo suavecito, sabrosón. Incluí las canciones en el playlist de discos nuevos.

Después de dos o tres más vueltas a las canciones, el disco ya no parece tan revolucionario, aunque definitivamente lo és. No niego la calidad del disco, pero en mi mente ya pasó a ser una curiosidad. Es para aquellas veces donde se está cenando con los amigos y se necesita un buen fondo musical y un tema de conversación (el disco en sí).

¿Recomiendo comprarlo? Por supuesto que sí. Si me robaran el disco, lo compraría de nuevo.
¿Les aseguro que estará en su rotación de discos por mucho tiempo? No lo creo.

Hancock para dos. julio 3, 2006

Tengo un año y medio con mi iPod. A su corta edad ya es un iPod de edad madura, pero que sigo disfrutando tanto como si fuese el más nuevo de los modelos (un año humano equivale a treinta años iPod). Tardé en comprarlo porque no quería ser de los que siguen la modas, pero al final no pude más. Estaba plácidamente en mi casa un sábado por la mañana y de repente me entró la idea de comprarlo. Una hora después ya estaba con la pequeño aparato cargándose mientras subía mi colección de CDs a la computadora. El iPod es excelente porque puedes traer toda tu música contigo, sin importar el lugar ni la hora. Pero lo más interesante es que descubres música que tenías olvidada, o que realmente nunca escuchaste porque no era el track más popular de un CD. Algunas veces, aunque hayas escuchado un album entero, y digo realmente escuchar, hay tracks que en su momento no mueven nada dentro de uno. Esos tracks, si se escuchan en el momento apropiado, suenan totalmente diferentes y pueden llegar hasta lo más profundo de la mente, o del corazón, o del alma, dependiendo de cual sea la inclinación de la personalidad de quien escucha. Para poder llegar a esas joyas escondidas tengo un playlist inteligente (con reservas del calificativo “inteligente”) que busca las canciones que menos se han tocado en mi colección.

Hoy descubrí “Rubber Soul” de Herbie Hancock en su album “Dis is da Drum”. Un excelente trenecito (así le llamo yo al fondo rítmico), donde encima se va construyendo la melodía, y donde los músicos tienen libertad total de expresión. Curiosamente, no son los teclados de Hancock que brillan más en este corte. Ellos sirven más como catalizador para que el sax y la guitarra hagan su trabajo como todo buen jazz debe ser: libre y expresivo. En ningún momento se torna una melodía arrebatadora en el sentido de que se quiera comer al escucha. Por el contrario, se mezcla suavemente con los pensamientos, dejándolos fluir sin interferir violentamente en ellos. Es de esas músicas que pueden servir como marco para dar un toque sensual a una velada de dos.